Hoy en día la edad es un factor clave cuando se trata de decidir tener un hijo, pero también es una de las principales causas de infertilidad. Y es que el tiempo pasa rápido, sobre todo en términos de reproducción asistida. En anteriores publicaciones de nuestro blog hemos hablado sobre algunas de las claras diferencias entre el reloj biológico y el reloj social. La tendencia a día de hoy es la de poner los objetivos laborales y sociales por delante de la maternidad, es por esto que la vitrificación juega un papel fundamental en el futuro de la maternidad.

En VITA no podemos cambiar esta tendencia social, según una encuesta realizada en el 2010 por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el 60% de las mujeres afirman que tener hijos supone un obstáculo para el desarrollo de su vida profesional. Lo que si podemos hacer es proporcionar soluciones para que una mujer pueda postergar la maternidad. En VITA hemos desarrollado la técnica de vitrificación de óvulos, que permite congelar óvulos a la mujer cuando son de más calidad, para usarlos cuando decida ser madre.

¿Qué supone esta vitrificación? La vitrificación de óvulos se trata de un seguro de fertilidad que permite a mujeres que, retrasan el momento de ser madres, no tengan que renunciar a serlo en un futuro con sus propios gametos. Este método de preservación de la fertilidad ha supuesto un gran avance para la medicina reproductiva.

¿Afecta la edad a la calidad ovocitaria? ¿Cuándo debo optar por la vitrificación?

Si, la edad afecta a la calidad ovocitaria, se trata del principal marcador de calidad ovocitaria, aunque es cierto que los ovocitos pueden sufrir alteraciones antes de lo previsto en casos de enfermedades genéticas, menopausia precoz, afectaciones del sistema inmunológico o por unos hábitos de vida poco saludables. Sí, pero, en términos generales, lo que condiciona el estado de las células sexuales femeninas es el paso del tiempo.

Toda mujer llega al mundo dotada de un número limitado de óvulos, algo conocido como reserva ovárica. En el momento del nacimiento se nos encontramos con aproximadamente un millón de ovocitos, cantidad que con el paso de tiempo disminuye. Pero, ¿cuándo debemos preocuparnos por nuestra calidad ovárica?

El punto de inflexión en la fertilidad femenina se da a partir de los 35, momento en el que se entra en una fase de regresión y cada año se acelera el declive. ¿Qué significa esto? La reserva ovárica sufre una caída acelerada, y, además, se sufre una irreversible disminución en la calidad de los óvulos. Como ocurre en gran parte del cuerpo del ser humano, todas las células del cuerpo se deterioran debido al envejecimiento. Esto causa la pérdida de algunos elementos del citoplasma que garantizan el óptimo funcionamiento celular. El deterioro de la calidad de los óvulos supone una gran dificultad para lograr el embarazo y llevarlo a término.

Es por esto que, si te planteas congelar tus óvulos, aconsejamos que te sometas a la vitrificación de óvulos antes de los 35. De esta manera, te asegurarás de que la calidad de tus óvulos jóvenes se mantenga intacta cuando los necesites más adelante.

Nuestros centros de medicina reproductiva se encuentran dentro de los de los hospitales IMED Levante e IMED Elche, ofreciendo unas excelentes instalaciones orientadas al bienestar y comodidad de los pacientes junto a la tecnología médica más avanzada.