El pasado mes fue noticia la exclusiva dada por la revista británica New Scientist del nacimiento hace cinco meses del primer bebé nacido gracias a la técnica reproductiva de transferencia pronuclear, conocida como de”tres padres genéticos” Este procedimiento incorpora el ADN de tres personas para librarlo de la enfermedad hereditaria de su madre.

Los padres, de origen jordano, llevaban 20 años buscando sin éxito el embarazo. La madre del bebé es portadora de genes causantes del síndrome de Leigh, una enfermedad mortal que afecta al sistema nervioso. Estos genes, que se encuentran en el ADN de las mitocondrias, fueron los responsables de la muerte de sus dos primeros hijos.

Gracia a esta nueva técnica de transferencia pronuclear, el bebé tiene el ADN de su padre y de su madre, además de una pequeña cantidad de código genético de una donante cuyo óvulo es necesario para albergar el código genético de ambos progenitores y además librarlo de los genes causantes de la enfermedad hereditaria, en este caso el síndrome de Leigh.

¿En qué consiste la transferencia pronuclear?

La técnica de transferencia pronuclear o de los “tres padres genéticos” fue desarrollada en Newcastle, Reino Unido. Esta técnica trata de combinar el ADN de los dos progenitores con el ADN mitocondrial sano del óvulo de una mujer donante.

Aunque se habla de forma popular de la técnica reproductiva de los tres padres, realmente solo se toma el 0,18% del ADN de la donante. Ninguno de los genes que se encuentran dentro del ADN mitocondrial controla la apariencia o físico, pero cuando estos genes contienen mutaciones pueden dar lugar a una enfermedad mitocondrial hereditaria.

El proceso de transferencia pronuclear original consiste en fecundar tanto el óvulo de la madre como el óvulo de la donante con el esperma del padre. Antes de que los óvulos fertilizados comiencen a dividirse en embriones en fase inicial, se retira el núcleo de los dos embriones resultantes. El núcleo del óvulo de la donante se desecha y el núcleo del óvulo de la madre, libre de enfermedades mitocondriales hereditarias, se introduce en el óvulo de la donante.

En el caso de esta pareja, por cuestiones religiosas se quería evitar la destrucción del embrión resultante de la donante, por lo que se utilizó una variación de la técnica. En este caso, el equipo del Centro de Fertilidad de Nueva Esperanza en Nueva York, liderado por el especialista en reproducción asistida, el Dr. John Zhang, utilizó un nuevo enfoque de esta técnica. En este caso, antes de fecundar los óvulos de la madre y de la donante, se extrae el núcleo del óvulo de la madre para introducirlo en el óvulo de la donante al que previamente se le ha retirado su propio núcleo. Este óvulo resultante se fecunda con los espermatozoides del padre.

Legislación de la Reproducción Asistida

La técnica de transferencia pronuclear original desarrollada en Newcastle está aprobada legalmente desde 2015 sólo en Reino Unido y en determinados casos cuidadosamente seleccionados. El equipo de especialistas de EEUU del Dr. John Zhang, tuvo que desplazarse a México para el desarrollo de esta nueva variante que no implica destruir embriones, país donde no existe legislación que regule la reproducción asistida.

En España todavía es pronto para plantear esta técnica aunque, según indican desde la Asociación para el Estudio de la Biología de la Reproducción (Asebir), su uso no está expresamente prohibido en la Ley de Reproducción Asistida vigente desde 2006, existiendo un vacío legal, aunque tendría que ser autorizada por la Comisión Nacional de Reproducción Asistida.

Técnicas para evitar la transmisión de enfermedades genéticas

Esta técnica reproductiva de “tres padres genéticos” tiene el fin de evitar la transmisión de una enfermedad genética. Afortunadamente existen técnicas como el Diagnóstico genético preimplantacional (DGP), que permite detectar y prevenir la transmisión de enfermedades graves causadas por alteraciones genéticas y cromosómicas en los embriones, antes de su implantación. De este modo se analizan los embriones resultantes de un ciclo de FIV y se transfieren los que no están afectados. En el caso de que la enfermedad hereditaria se encuentra en las mitocondrias del óvulo, como sucedía en este caso, la única solución pasa por recurrir a la Fecundación In Vitro con donación de óvulos.