Las parejas serodiscordantes son aquellas donde un miembro de la pareja está infectada con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y su pareja no lo está. Los avances actuales en el pronóstico y tratamiento de la infección por VIH han abierto nuevos horizontes a los parejas serodiscordantes, planteándose la posibilidad de tener hijos.

Los nuevos tratamientos con antirretrovirales de gran actividad (TARGA) permiten eliminar la replicación del virus y mejorar la situación inmunológica de la persona seropositiva. El aumento de la expectativa y calidad de vida de las personas con VIH, así como la disminución de la tasa de transmisión sexual del VIH gracias a los avances médicos, hace que muchas parejas serodiscordantes en edad fértil se planteen la posibilidad de un embarazo, mediante métodos naturales o tratamientos de reproducción asistida.

Pero antes de comenzar con cualquier intento de quedarse embarazada, es importante acudir a un especialista en medicina reproductiva. Las parejas deben ser informadas de las opciones disponibles, así como los beneficios y riesgos asociados a cada una de ellas. Antes de decidir el tratamiento, el especialista deberá valorar el grado de fertilidad de la pareja, el estado del virus VIH, su evolución y carga viral, además del tratamiento médico seguido.

Las clínicas de medicina reproductiva deben seguir un protocolo específico para parejas serodiscordantes, y disponer de un equipo de profesionales y de un laboratorio convenientemente adaptado para asegurar el éxito del tratamiento.

Parejas serodiscordantes donde el hombre tienen VIH

Si la persona que tiene VIH en la pareja es el hombre, las opciones que tiene la pareja para tener hijos son:

  • tener relaciones sexuales naturales sin protección, con el riesgo de transmisión del VIH a la pareja y al hijo, donde este riesgo dependerá de factores como la carga viral y el tratamiento con antirretrovirales seguido,
  • utilizar un tratamiento de reproducción asistida como la inseminación artificial o la fecundación in vitro con semen de un donante anónimo,
  • utilizar un tratamiento de reproducción asistida con semen propio, eliminado el virus mediante un lavado de semen dejando solo los espermatozoides móviles.

La técnica del lavado de semen pretende reducir sustancialmente la presencia del virus en el semen antes de realizar cualquier tratamiento de reproducción asistida.

Bajo un estricto protocolo de seguridad se realiza un lavado de semen, mediante un procedimiento de centrifugado que logra separar los espermatozoides del resto de semen (plasma seminal, células no espermáticas y espermatozoides inmóviles), principales fracciones con presencia demostrada de virus. Este proceso se realiza de forma repetida para minimizar el riesgo.

Esta muestra de semen obtenida se divide en dos, una para realizar un estudio de la carga viral y otra parte de espermatozoides que serán congelados. Una vez confirmada la negatividad del virus VIH, se procederá con una inseminación artificial o una fecundación in vitro mediante ICSI con los espermatozoides libres de virus VIH.

Parejas serodiscordantes donde la mujer tienen VIH

Si la persona que tiene VIH en la pareja es la mujer, la tasa de transmisión del virus VIH de la madre al hijo es de aproximadamente un 1%, debido a la efectividad de los nuevos antirretrovirales de gran actividad.

Para llevar a cabo un embarazo con éxito, la mujer debe encontrarse bajo tratamiento con antirretrovirales y tener una baja carga viral. En estos casos, se puede emplear el semen de la pareja y mediante un tratamiento de reproducción asistida conseguir el embarazo.

En estos casos, el control adecuado del embarazo es fundamental para reducir el riesgo de transmisión al feto, siguiendo un tratamiento con antirretrovirales para minimizar ese riesgo. A la hora del parto puede ser conveniente realizar una cesárea, y se debe evitar la lactancia materna. También puede ser necesario un tratamiento con antirretrovirales en el recién nacido.

Técnicas de reproducción asistida en parejas serodiscordantes

Actualmente se emplean los siguientes tratamiento de reproducción asistida en parejas serodiscordantes que desean tener un hijo:

  1. Inseminación artificial
    Mediante esta técnica se depositarán los espermatozoides en el útero mediante una cánula para conseguir el embarazo.
  2. Fecundación In Vitro (FIV) con técnica de microinyección espermática (ICSI)
    En las parejas serodiscordantes se suele aconsejar un FIV mediante ICSI. Mediante esta técnica el espermatozoide es introducido en el interior del ovocito mediante una microaguja, minimizando el contacto ovocito-espermatozoide. Por tanto, el riesgo de transmisión del VIH se reduce, al eliminar del proceso cualquier otro tipo de célula.

Las parejas serodiscordantes en las que el hombre es el portador del VIH, puede utilizarse semen de un donante anónimo o realizar un lavado de semen para reducir la carga del virus.

Las tasas de éxito de fecundación y embarazo son similares a las tasas en pareja no serodiscordantes.