Cuando una paciente decide realizarse un tratamiento de Reproducción Asistida, uno de sus miedos más habituales es la administración de la medicación hormonal y sus posibles efectos secundarios.

La mayoría de los fármacos que se prescriben desde una consulta de Reproducción Asistida se pueden auto-administrar por la propia paciente. Hay de todos los formatos: comprimidos orales y vaginales, inyecciones subcutáneas preparadas en cómodas plumas, otras más laboriosas, etc. El abanico de medicación hormonal disponible es muy amplio, y será el ginecólogo especialista de VITA quien determine y prescriba la más adecuada para cada paciente dependiendo de la reserva ovárica que ésta presente, de su edad, antecedentes médicos, patologías, es decir, la medicación será diferente, personalizada.

Con el fin de minimizar el posible miedo que la paciente pueda tener, cuando en VITA le prescribimos la medicación que ha de comprar en farmacia, le entregamos un cuadernillo del ciclo del tratamiento que va a seguir. En él, se detalla de manera muy clara los pasos a seguir, medicación a tomar, dosis y las próximas citas para las ecografías, anestesista, etc.

Además, para su tranquilidad, en VITA todas nuestras pacientes disponen del número móvil directo de la unidad para poder realizar cualquier consulta las 24 horas del día. Entendemos que pueden surgir muchas dudas durante todo el proceso de tratamiento y el acceso a la información debe de ser continua y accesible. Las consultas vienen por parte de la medicación, sangrados no esperados, resultados de pruebas, qué tomar o no tomar durante la estimulación hormonal, calendario del proceso, etc.

Desde mi opinión, el hecho de realizar un tratamiento de Reproducción Asistida dentro de un hospital, con acceso directo a todas las especialidades, con atención telefónica las 24 horas del día, es tremendamente beneficioso para la tranquilidad y seguridad de nuestros pacientes. Si ellos están tranquilos y seguros, nosotros también.

Tipos de fármacos más habituales para el tratamiento de la fertilidad

Algunos de los medicamentos más comunes que se utilizan en los tratamientos de reproducción asistida son:

  • Gonadotropinas: son los fármacos por excelencia de un tratamiento de fertilidad. Sirven para estimular controladamente el funcionamiento de los ovarios y así poder recoger posteriormente los óvulos u ovocitos que se hayan desarrollado en ellos. Las presentaciones comerciales más habitaules son Menopur® 75 y 1200, Gonal®, Puregón®, Fostipur®, HMG-Lepori®, Ovitrelle®.
  • Anticonceptivos orales: se utilizan habitualmente antes de un ciclo de FIV por diversos motivos. Entre ellos, controlar el ciclo y asegurar una mejor respuesta posterior a la medicación.
  • Citrato de Clomifeno (Omifin®): es un inductor de la ovulación. Utilizado desde hace muchos años, hoy en día se continúa utilizando sólo o en combinación de otros fármacos para aprovechar su facilidad de toma y sus escasos efectos secundarios.
  • Agonistas de la GnRH: Hay varios tipos, y se pueden administrar en diferentes momentos del ciclo de FIV según el efecto que se desee. En general sirven para controlar mejor la estimulación ovárica y que haya una mejor respuesta a las gonadotropinas. Los efectos secundarios más habituales son los sofocos, pero siempre es un efecto temporal que cede al poco tiempo de haberlos utilizado.
  • Antagonistas: Desde su introducción en el manejo de los tratamientos de FIV, han hecho más cómodo la monitorización de la estimulación, ya que ayudan a evitar una ovulación temprana y que no podamos finalizar con éxito el tratamiento. El efecto secundario más frecuente es local, ya que en ocasiones se produce un eritema y escozor similar a la picadura de un insecto.
  • Progesterona: Habitualmente utilizada vía vaginal en forma de óvulos. Proporciona un soporte hormonal a la fase lútea del ciclo (tras la ovulación) cuando ésta es insuficiente o el tratamiento realizado así lo requiere. Las dosis son variables y también se puede utilizar vía oral. Lo más frecuente es referir somnolencia en estos casos, y si la vía es vaginal, irritación local y aumento en la cantidad de flujo.
  • Estrógenos: En los tratamientos de donación de óvulos, transferencia de embriones vitrificados, etc, utilizamos estos fármacos para preparar el endometrio y hacerlo más receptivo al embrión que queremos que implante y dé lugar a un embarazo evolutivo. Se pueden utilizar vía oral o vía trasdérmica.

En conclusión, los fármacos empleados en los tratamientos de reproducción asistida pueden manejarse de maneras diferentes según el efecto que se busque en cada caso. Esto será individualizado para cada pareja, por lo que en unos casos el mismo fármaco lo utilizaremos de una manera y en otros, de otra.

Como en cualquier otro tipo de fármacos, estos también cuentan con los efectos secundarios. Sin duda, en ocasiones el paciente puede percibir molestias, náuseas, vómitos, distensión abdominal, mareos, alteraciones del estado de ánimo, similares a los efectos hormonales del ciclo femenino o incluso del propio embarazo. Los ginecólogos especialistas, deben intentar minimizarlas en la medida de lo posible, ya sea modificando la medicación o tratando el efecto secundario en sí mismo. De ahí la importancia de la buena comunicación entre la pareja y el equipo médico que se encarga de su tratamiento de Reproducción Asistida.

Firma: Sonia Esteve, directora de VITA, Unidad de Reproducción Asistida de IMED Hospitales.